Los Cenotes de Candelaria representan una maravilla natural que atrae a visitantes de todo el país debido a sus aguas cristalinas y su impresionante belleza escénica.
Estos cenotes están interconectados por una red de ríos subterráneos en el municipio de Nentón, ofreciendo un espectáculo visual único que varía según la temporada, la hora del día y los vientos circundantes. El agua, que exhibe tonalidades que van desde el azul turquesa hasta el verde, crea un paisaje místico y sumamente hermoso que cautiva a todos los que tienen la suerte de visitarlo.
Estas formaciones acuáticas tienen una profundidad estimada de alrededor de 30 metros, aunque no ha sido oficialmente medida. Situados en un entorno rodeado de cultivos típicos de la región, como rosa de Jamaica, jocote, manía, café y maíz, los cenotes crean un ambiente natural único donde se forman embalses naturales y ríos subterráneos que serpentean a lo largo del municipio.
Según los lugareños, uno de los cenotes tiene una antigüedad de más de 35,000 años, lo que añade un aura de misterio e historia a estos lugares. El agua en la zona de los cenotes es dulce y potable, proporcionando una experiencia refrescante y segura para los visitantes, y su ubicación a solo dos kilómetros de la frontera entre Guatemala y México añade un elemento único que trasciende las divisiones políticas. La palabra «cenote» proviene del maya tz’onot, que significa pozo o abismo, lo que refleja la naturaleza profunda y misteriosa de estas formaciones acuáticas.
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